Después de lo visto futbolísticamente entre Deportivo Pereira y Boyacá Chicó, se evidencia que son dos equipos muy mal armados, con muchas dificultades en sus nóminas, con pocas ambiciones, y sobre todo con múltiples problemas para sostenerse en la máxima categoría del fútbol profesional colombiano, luego del ascenso de ambos en diciembre del 2019.
Hemos visto equipos que juegan a no perder, ultradefensivos y apostándole solamente a una de las fases del fútbol, la defensiva; pero lo que vimos la noche anterior en el Hernán Ramírez Villegas fue dos equipos que jugaron ano ganar, que pobreza futbolística tan impresionante, a uno de los dos solo los salva irse a la B, que José Augusto Cadena dueño del Cúcuta Deportivo lo desapareció y dejó un cupo para el descenso.
Para efecto del deportivo Pereira, un planteamiento que No le dio resultado al cuerpo técnico. Quería tenencia de pelota y nunca la tuvo, quería ser ofensivo y no atacó nunca, y perdió a Johnny Vásquez por expulsión y embolató los papeles del partido. Un equipo con la necesidad de ganar, no puede jugar tan lejos dela arco adversario, a tal punto que la única llegada fue el gol anulado a Danny Cano en el minuto 94. Las estadísticas son claras, Deportivo Pereira solo cobró 2 tiros de esquina, 3 fuera de lugar, 3 remates al arco y cero paradas del arquero del Chicó, cifras muy pobres. El 4-1-2-3, transformado en 4-1-4-1, 4-3-3, solo fueron números sin ninguna aplicación futbolística.
La tabla de posiciones del descenso queda con Boyacá Chicó 100 puntos por 102 del Deportivo Pereira. Próximos partidos, Junior ante Deportivo Pereira y descansa Boyacá Chicó.